El quinto album de Toro y Moi, con claras influencias de Frank Ocean firmemente presentes y destellos ochenteros muy reconocibles en sus sintetizadores y baterías electrónicas. Una poesía en movimiento llama de texturas sonoras e innovadoras, creando atmósferas sensuales dignas de paladares más que exquisitos. En resumen estamos ante un disco para besarse, y solo por eso merece una tormenta de elogios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario